Los padres la temen, los niños la alcanzan sin darse cuenta y los educadores, a veces, la rehuyen o la enfrentan apelando a la denostada autoridad. La adolescencia es una etapa vital que preocupa, por ser un momento convulso, en el que el niño que ya no es niño «suelta sus vínculos con el hogar paterno», sin encontrar en la escuela el «apoyo y asidero» que sugería Freud.
El psicoanalista palentino Fernando Martín Aduriz, consejero de la Escuela Lacaniana de Psicoanálisis y colaborador de DP, ha compilado 17 textos de autores de cinco países que desarrollan su trabajo con adolescentes en el ámbito del psicoanálisis, en el libro Adolescencias por venir, de la Colección de la ELP, que acaba de publicar la editorial Gredos.
Jóvenes de Italia, Francia, Argentina y España que tienen síntomas comunes, pero nunca idénticos. «Este libro es el resultado del trabajo de psicoanalistas atravesados por la pregunta de cómo serán las adolescencias por venir. Psicoanalistas que conversamos con adolescentes a diario y desde hace un tiempo. Es un libro fruto de muchos años escuchando a adolescentes en nuestras consultas», explica el autor palentino en el prólogo del libro, que ya se ha presentado en Jerez de la Frontera y en Sevilla y lo hará próximamente en ciudades como Milán, Vigo, Barcelona, Madrid, León, Murcia y Granada, entre otras.
En esa vía hacia el propio deseo que el psicoanalista trata de abrir destaca «la búsqueda en cada nuevo adolescente de esa fórmula propia, de ese despliegue único y original de sus soluciones y, por ello, no aplicamos idénticas recetas, métodos en serie ni cuestionarios ni protocolos estandarizados. Nos guiamos por la práctica clínica del uno por uno», subraya. No en vano, el título del libro, Adolescencias en plural, es «una apuesta por remarcar que existen diversidad de formas de vivir la adolescencia y pluralidad de adolescentes encontrando sus salidas».
El libro no sólo se dirige «al analizante experimentado», sino también al educador, a los padres y a la opinión pública. Esta etapa vital es un asunto que interesa a la sociedad. Un ejemplo es el éxito de matrícula que ha tenido el primer curso breve Adolescentes. Deseo o identidad, que impartirá Fernando Martín Aduriz el viernes y el sábado en el Centro Doltó de la capital.
Uno de los aspectos que cuestionan los autores presentes en este volumen es el papel de la educación, que a menudo se confunde con la enseñanza. En un momento de cambio de valores, en los que los alumnos están más abiertos a la evolución de la sociedad que sus padres y profesores, la escuela se ve obligada a reinventarse.

El libro recuerda que el papel del psicoanalista no es nunca servir de modelo a imitar, ni aplicar correctivos. Tampoco extender «las fórmulas de premios y castigos que nunca funcionaron». Es, más bien, «el deseo de impedir que nadie se conforme con imitar al de al lado, sino que luche febrilmente por desplegar su propia singularidad».